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México intenta mejorar su currículum

Female student holding a vintage bike

La situación educativa en México no pasa por uno de sus mejores momentos. De acuerdo a los últimos datos de PISA, los estudiantes no han tenido avances importantes en comprensión lectora, matemáticas y ciencia. Y lo cierto es que los resultados no han cambiado mucho en los últimos doce años, lo que obliga a hacer una profunda reflexión sobre qué está fallando.

Las condiciones socioeconómicas del país marcan los resultados. La mitad de los estudiantes no alcanza niveles suficientes para lograr adaptarse a la nueva sociedad del siglo XXI: el 45 % no consigue los aprendizajes necesarios en Lectura, el 56 % en Matemáticas y el 47 % en Ciencias. En el ranking de 2018, México estaba en la posición 35. Se coloca casi a la misma altura de Chile en una lista en la Estonia obtuvo el primer lugar.

El rincón de la lectura

Por detenernos específicamente en la lectura, el profesor e investigador de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco, Ariel Gutiérrez Valencia, analizaba en una magnífica investigación sobre esta competencia en México titulada La lectura: una capacidad imprescindible de los ciudadanos del siglo XXI. El caso de México  la necesidad que tiene este país de mejorar: “La sociedad de la información y el conocimiento nos está dejando muy claro que los ciudadanos del siglo XXI nos constituimos en los principales usuarios de estas transformaciones vertiginosas a través del uso y difusión de la información, materia prima esencial del conocimiento humano. En estos escenarios mutantes, la lectura se constituye en la llave de acceso a la sociedad del conocimiento en virtud de que a través de ella conocemos, comprendemos, consolidamos, analizamos, sintetizamos, aplicamos, construimos y reconstruimos los saberes de la humanidad”

Además de la educación, los altos niveles de informalidad influyen a que la calidad de la mayor parte de los empleos en México sea baja, y esto no ayuda a desarrollar y mejorar las habilidades de los trabajadores ni tampoco la de los y las estudiantes.

Pero, a pesar de todo, México no abandona su empeño por salir adelante y dejar atrás estos resultados sin duda decepcionantes. Y no para de hacer esfuerzos para saltar este bache.

Hay voces que se niegan a que esta situación se siga alargando y ponen sobre la mesa fórmulas para cambiar el rumbo.

 

Organización de contenidos

Su plan curricular, por ejemplo, plantea la organización de los contenidos programáticos en tres componentes curriculares:

  • Campos de Formación Académica, que están configurados por tres áreas: Lenguaje y Comunicación, Pensamiento Matemático y Exploración y Comprensión del Mundo Natural y Social. A su vez, se divide en asignaturas que tienen como objetivo primordial desarrollar la capacidad de los alumnos por aprender a aprender.
  • Áreas de Desarrollo Personal y Social, que se organiza en tres Áreas de Desarrollo: Artes, Educación Socioemocional y Educación Física.
  • Ámbitos de la Autonomía Curricular, que está organizado en cinco ámbitos: “Ampliar la formación académica”, “Potenciar el desarrollo personal y social”, “Nuevos contenidos relevantes”, “Conocimientos regionales” y “Proyectos de impacto social”. Estos tres componentes curriculares están orientados a adquirir y desarrollar aprendizajes clave para la educación integral.

Potenciando todos estos conceptos e ideas el país estaría más cerca de cambiar sus resultados académicos.

Reformas educativas

México no quiere alejarse de una realidad que no le es favorable y ya en 2016 empujó el «Nuevo Modelo Educativo» que contemplaba cinco ejes:

  1. La Escuela al centro.
  2. El planteamiento curricular.
  3. Formación y desarrollo profesional docente.
  4. Inclusión y equidad.
  5. La gobernanza del sistema educativo.

La siguiente reforma educativa, que derogaba la del ex presidente Peña Nieto, fue aprobada el pasado año:

  1. Se crea un Sistema para la Carrera de las Maestras y Maestros, en el que Federación tendrá la rectoría, y un Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación.
  2. No habrá evaluaciones punitivas ni obligatorias para los maestros, quienes tendrán derecho a un sistema de formación gratuito. No se determinará la permanencia de los docentes en sus puestos por los resultados que vayan teniendo en las pruebas que se les hagan.
  3. Los artículos reformados son el 3, 31 y 73 constitucionales, que en materia educativa tiene algunos cambios, por ejemplo, que en planes y programas de estudio incluyan la enseñanza de matemáticas, la lecto-escritura, la literacidad y la educación sexual y reproductiva.
  4. Se menciona la recuperación de estudios de civismo, valores, cultura, arte, música, deporte, y medioambiente.
  5. Se habla de una nueva política educativa diferenciada por zonas que permitirá una educación indígena, bilingüe y bicultural.
  6. El Estado garantizará que los materiales didácticos, la infraestructura educativa, su mantenimiento y las condiciones del entorno sean idóneos. Asimismo, se agregan a los principios de educación gratuita, laica y obligatoria, los de universalidad, equidad y excelencia, para todos los niveles, incluyendo universidad.

Facilitar una educación de calidad

El objetivo de la reforma educativa en México concuerda con las recomendaciones de la OCDE de crear una sociedad más inclusiva a través de la igualdad de oportunidades para todos y de la reducción de la pobreza, facilitando una educación de calidad para todos los mexicanos.

Los índices de escolarización en México en primaria y secundaria son prácticamente universales; no obstante, en los niveles de educación media superior estos índices siguen siendo relativamente bajos. Durante la transición de secundaria a la escuela media superior, el índice de escolarización de estudiantes de 15 a 19 años cae a 54 % aproximadamente; el índice más bajo para este grupo de edad entre los países de la OCDE, y muy por debajo de la media (84 %).

Además, en México, los beneficios de cursar educación superior están entre los más elevados; sin embargo, solo el 16 % de los adultos (de 25 a 64 años) han cursado este tipo de estudios, siendo la proporción más baja.

 

¿Qué ocurre con las competencias?

Las competencias son la piedra angular de la prosperidad de México y del bienestar de su población. Promover mejores competencias y más igualitarias, sobre todo para las mujeres y los jóvenes, sentará las bases para construir una sociedad más equitativa y cohesionada.

En México los empleadores tienen dificultades para cubrir sus vacantes, pues los candidatos (70,5 %) no poseen las competencias requeridas. Por ello se debe poner énfasis en la necesidad de un marco de aprendizaje a lo largo de la vida que posibilite actualizar sus habilidades y aumentar su productividad.

Ante esta situación,  el gobierno de México solicitó el apoyo de la OCDE para la elaboración de una Estrategia de Competencias, Habilidades y Destrezas, presentado en 2017, y que mostraban una serie de recomendaciones que tenían como fin incrementar la productividad. Se acordó trabajar en una estrategia de formación de habilidades con una visión a largo plazo.

A raíz de ese informe, el Comité Nacional de Productividad de México (CNP) solicitó a la OCDE la elaboración de recomendaciones específicas en áreas prioritarias.

Desafíos para México

Entre los desafíos más importantes que México tiene que afrontar en cuanto a competencias están:

  • Mejorar el nivel de las competencias de los estudiantes de educación obligatoria.
  • Aumentar el acceso a la educación superior.
  • Promover la activación de competencias de grupos vulnerables.
  • Respaldar la colaboración entre el Gobierno y las partes interesadas para alcanzar mejores resultados en materia de competencias.
  • Mejorar el financiamiento público y privado de las competencias.

 

Según una encuesta realizada por el Banco Interamericano para el Desarrollo el pasado año y que aparece en el documento titulado El futuro ya está aquí. Habilidades transversales en América Latina y el Caribe en el siglo XXI, las  habilidades  transversales  son  clave  para  triunfar  en  el  mundo  de  hoy  y  se ha ampliado el espectro de habilidades que los individuos deben aprender. Los encuestados, entre los que se encuentran estudiantes mexicanos, piden al sistema  educativo  que  sepa  prever  y  proveer  de  habilidades  para  afrontar  el  futuro con  seguridad.

 

Destrezas y habilidades del siglo XXI

Un gran número de jóvenes mexicanos aún no logran desarrollar altos niveles de competencias, habilidades y destrezas, debido a su bajo desempeño escolar.

“En el siglo XXI, las competencias, destrezas y habilidades se han convertido en el factor clave para lograr el bienestar individual y el éxito económico de una sociedad. Sin una inversión adecuada en estos ámbitos la población languidece al margen de la sociedad”, señala un informe de la OCDE.

México desea vivir en plenitud en el siglo XXI y está invirtiendo gran parte de sus esfuerzos en conseguir mejorar sus resultados educativos y en desarrollar las habilidades necesarias que sus estudiantes deben tener para subirse a tren de la 4ª Revolución Industrial, con todos sus avances y todos sus cambios con respecto a épocas pasadas.

Desde la plataforma educativa Mexicanos primero se convoca a las autoridades educativas a que sigan impulsando acciones y políticas públicas que garanticen que cada niña, niño y joven esté, aprenda y participe en la escuela. “Ningún estado cumple con su responsabilidad de garantizar el aprendizaje de las niñas, niños y jóvenes, pero 12 entidades han mejorado desde 2016”, señala en uno de sus informes más recientes.

Solo si México es capaz de sacar el máximo provecho de las recomendaciones de los expertos y si consigue poner en práctica sin fisuras los ejes de su nuevo modelo educativo saldrá airoso de este momento tan complicado.

Estamos convencidos de que será capaz de hacerlo.

La educación nos une.